Artista Plástico mexicano. Nacido en la Ciudad de México.

Sus raíces principales vienen totalmente de una cultura donde la aparición de las artes se evoca en todos sus aspectos tradicionalistas y contemporáneos, nacido de padre Oaxaqueño y madre Mexiquense, quienes desde la infancia fomentaron en él, el amor hacia las artes y todo lo que tenia que ver en ello, por parte del padre encontramos que proyectó en su formación las Artes Gráficas, Litografía e Imprenta así como el Bel canto en especial la opera la cual él artista utiliza en la actualidad como fuente de concentración al realizar una obra buscando de esta manera la sensibilidad en toda su proyección, y por parte de su madre el amor a sus raíces, la cultura, a su gente, las tradiciones y la belleza que causa el hecho de existir y todas las obras naturales que pueden ser plasmadas en ideas hacia obras del artista haciendo de esta una manera de interpretar la creación ya existente en la vida.

Formación, Egresado de la Academia Instituto Roosevelt en la carrera de Artes Plásticas y Diseño Gráfico, para Miguel Ángel Castillo Lara la pintura es la forma de expresión más sublime y perfecta en donde existe un dialogo con el espectador.

Con gran habilidad y destreza a practicado una gama de técnicas desde las mas comunes hasta desarrollar aquellas que son parte de su creación al poder lograr mezclar sustancias poco comunes dominando la técnica acuarela, el oleo, tinta, pastel entre otras como de utilización gráfica manteniendo un estilo propio que lo caracteriza. En su obra predomina la técnica mixta, en el que expresa a través de trazos una gran temática y contenido, creando un ambiente totalmente de reflexión y de emociones. Su técnica cromática en conjunto con el gran manejo de la composición, ambientación, se orientan hacia una gama de colores, a fin de manifestar texturas, movimientos que parecen sobresalir de la obra.

Como parte de su trayectoria artística, vemos que participo en la realización de escenografías en el Palacio de Bellas Artes para diversas obras de teatro entre las que destacan: Mi Bella Dama (1984), La Opera Sansón y Dalila (1986), La Casa de los Corazones Rotos (1986), Luces de Bohemia (1988) y Los Miserables (1988).

Cabe notar que es digno de admirar como el artista tiene una notable visión del mundo que le incita a plasmar las máximas expresiones en sus diferentes manifestaciones, matices y emociones que el mundo emite a través de sus ojos dando en ello la interpretación y traducción de un lenguaje multicolor, estético y geométrico que hace de esta su mayor expresión en todo su Arte como un don que el mismo reconoce es de origen divino un regalo.